CANCÚN, Quintana Roo.— De octubre a diciembre, la Secretaría Estatal de Salud (Sesa) capacitó a 500 estudiantes y padres de familia del Centro de Bachillerato Tecnológico Agropecuario (CBTA), de Kantunilkín, con el objetivo de prevenir adicciones entre los jóvenes, informó el Jefe de la Jurisdicción Sanitaria Número 2, Jorge Gutiérrez Contreras.
En cumplimiento a las instrucciones del secretario de Salud, Juan Lorenzo Ortegón Pacheco, y acorde con el eje Solidario del Plan Quintana Roo 2011-2016, instaurado por el gobernador Roberto Borge Angulo, se promueve la prevención de adicciones para que los jóvenes no caigan en conductas delictivas, por lo que también se trabaja de manera coordinada con los padres de familia, indicó.
—La respuesta de mamás, papás, tutores y familiares fue muy alta, son padres preocupados por sus hijos y ahora pueden explicar mejor sus emociones —destacó el especialista.
Dijo que también se instruyó sobre las conductas de riesgo y se brindó información para el fortalecimiento de las habilidades sociales y de pensamiento. “Se aplicaron cuestionarios a fin de detectar adolescentes en riesgo de padecer adicciones, se otorgó consejería y orientación en prevención de violencia y un taller de orientación a familiares”, abundó.
En este sentido, Gutiérrez Contreras subrayó que en la Zona Norte de Quintana Roo existen 5 Centros de Atención Primaria en Adicciones (Uneme-CAPA), unidades especializadas de atención, orientación y consejería en adicciones.
En Cancún hay dos unidades localizadas en la Región 516, Manzana 14, lote 1, con teléfono: 8 82 85 61; otra en la Región 221, atrás del centro de Salud Urbano 14, con teléfono 1 32 87 05, ambas brindan atención de lunes a viernes de 8 de la mañana 3 de la tarde.
También hay en Playa del Carmen, ubicada en la 30ª Avenida Norte, colonia Luis Donaldo Colosio, con teléfono 859 42 17; en Tulum, calle Ontario, con teléfono 871 23 41 y otra en Cozumel, entre las avenidas 11 y 20, con teléfono 869 30 64.
—Los tratamientos que otorgan estas unidades son totalmente gratuitos y confidenciales, por lo que cualquier persona que tenga problemas con su manera de beber o problemas familiares o relacionales por el consumo, pueden acercarse y solicitar información —concluyó.