CIUDAD DE MÉXICO, (SinEmbargo).- Enero será un mes difícil para los mercados. Así lo estimaron analistas financieros y el mismo encargado de las finanzas del país, Luis Videgaray Caso, quienes advirtieron de los efectos negativos que puede tener para la economía mexicana la desaceleración de la de China. Los analistas prevén que, por lo menos, la primera mitad del año será complicada para el tipo de cambio. Pero a partir de la segunda parte, se empezará a normalizar la situación.
James Salazar Salinas, subdirector de análisis económico de CI Banco, comentó a SinEmbargo que las condiciones coyunturales externas son las que afectan las notables “subidas y bajadas”.
En los primeros cuatro días de la semana, la moneda mexicana sufrió una depreciación de 2.42 por ciento al incrementarse el valor del dólar de 17.70 pesos del lunes a 18.13 pesos al cierre de este jueves. Ni los 400 millones de dólares que ayer subastó con precio mínimo el Banco de México (Banxico) fueron suficientes para frenar la caída.
Por su parte, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) cayó 2.27 por ciento y cerró en 40 mil 661.57 unidades, un nivel que no se había visto desde diciembre de 2014 y con ello sumó nueve sesiones a la baja, cuatro de ellas en los primeros días de 2016.
La situación no fue distinta para otros mercados en el mundo. En Estados Unidos, el Wall Street sufrió su peor caída en tres meses. El Dow Jones perdió 392.49 puntos y terminó en 16 mil 514.02 unidades, mientras que el selectivo S&P 500 bajó un 2.37 por ciento hasta 1,943.09 enteros y el índice Nasdaq cayó un 3.03 por ciento hasta 4 mil 689.43 puntos.
Tan sólo en los primeros tres primeros días del año de operaciones, los mercados mundiales perdieron 2.37 billones de dólares, según datos de la agencia Bloomberg, lo que equivale –planteó– a dos veces el Producto Interno Bruto (PIB) de México en 2014.
Ante la depreciación del yuan, las monedas latinoamericanas se debilitaron por el temor mundial en las materias primas. En ese contexto, el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Luis Videgaray Caso, habló de una posible guerra de divisas.
“Hay una preocupación real de que, ante la desaceleración de la economía china, la respuesta de política pública sea iniciar una ronda de devaluación competitiva”, dijo al alertar sobre una posible etapa de depreciación artificial de monedas para impulsar exportaciones si China responde con una devaluación para volver su moneda más competitiva, lo que generaría una mayor turbulencia financiera.
EU, la esperanza
Para los analistas consultados por SinEmbargo, durante los primeros días del año se intensificó la incertidumbre que tenían a finales del año pasado. Con las noticias sobre China regresaron las preocupaciones de la salud económica de los emergentes.
“La búsqueda de activos más seguros presiona a los mercados de las economías emergentes incluyendo cambiarios y de capitales y en particular el peso mexicano”, dijo Salazar Salinas.
Javier Amador Díaz, economista principal de BBVA Bancomer, dijo que los detonantes emergentes de las últimas variaciones en el tipo de cambio tienen que ver con el precio del petróleo y que “el principal riesgo está asociado a la economía china y la decisión de las autoridades; en particular hoy [ayer] que cayó en un 5 por ciento y esto aumentó la preocupación del ciclo económico”.
Detalló que antes, cuando se llegaba a estos niveles, había una regla que determinaba la suspensión de las actividades en la bolsa durante 15 minutos, pero esta medida fue retirada porque los actores tenían prisa por vender acciones antes de que se llegara a dichos porcentajes “ y aunque ya quitaron dicha medida no quiere decir que vaya haber menor volatilidad”.
En ese contexto, el propio Secretario General de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría, dijo que ante la desaceleración de la economía china México tiene a su favor su estrecha relación económica con Estados Unidos.
“Le afecta al mundo entero el hecho de que China crezca menos, pero más a algunos países que dependen de la demanda de materias primas (…) En el caso de México tiene un impacto menor porque no es un exportador de commodities, las ventas de petróleo son una fracción de las exportaciones totales”, afirmó a CNN Expansión.
Con él coincidió el analista de CI Banco, quien expuso que en “el corto plazo podríamos esperar que lo único que podría revertir la tendencia de depreciación es el informe de empleo de Estados Unidos, que de salir positivo con una creación de empleos cercana a 200 mil, esto le pudiera permitir al peso recortar algo de pérdidas, quizá bajarse unos 10 o 12 centavos”.
En los primeros días de la semana, el peso cayó 2.42por ciento y tan sólo de un día para otro subió 30 centavos. Sin embargo durante la primera mitad del sexenio de Enrique Peña Nieto, la moneda mexicana ha rebasado cinco barreras psicológicas al pasar de los 12.93 pesos por billete verde con los que inició su administración a los 18.13. Lo que equivale a un aumento de un costo de boleto de Metro en tres años.
Fuente: Por Esto!