CHETUMAL, Q. Roo.- Productores de coco de Quintana Roo alertaron sobre las afectaciones del ácaro rojo en los cultivos, debido a que en la zona Calderitas y Laguna Guerrero existen más de dos mil 200 hectáreas en riesgo, por lo que piden a las autoridades que los apoyen con un programa emergente.
José Rodela Agüero, presidente del Sistema Producto Palma de Coco, señaló que le solicitaron al Comité de Sanidad Vegetal de Quintana Roo (Cesaveqroo), implemente un programa especial para que los copreros no vean afectados sus cultivos, sobre todo ahora que se prevé una intensa sequía en la entidad.
«Nos afectaría en el desarrollo de la fruta, disminuyendo el volumen y con ello también se nos mermarían nuestros ingresos»
Comentó que dentro de los próximos días iniciará la producción de coco en la zona productiva, y por lo pronto ya se realizan trabajos de mantenimiento de la planta, aunque el temor de los agricultores es que la fruta se vea afectada por esta plaga, la cual no sólo amenaza a los cocoteros, sino también a diversas especies de palmas que se encuentran en todo el estado.
“El ácaro rojo afecta a cualquier tipo o especie de palma, pero específicamente a nosotros los productores de coco nos preocupa, porque nos afectaría en el desarrollo de la fruta, disminuyendo el volumen y con ello también se nos mermarían nuestros ingresos, por lo que ahorita necesitamos las intervención de autoridades de sanidad vegetal” afirmó el entrevistado.
Por su parte, el presidente del Cesaveqroo, Evaristo Gómez Días, reconoció que existen reportes de afectación en la zona de Calderitas, Laguna Guerrero y Luis Echeverría, regiones que son altamente productivas de coco y en donde la presencia del ácaro rojo ha comenzado a generar preocupación entre los copreros.
Aseguró que durante el 2015 se implementó un programa para combatir al ácaro en esta región, sin embargo, los recursos fueron insuficientes para mantener una campaña permanente, por lo que actualmente esperan la liberación de recursos por parte de las autoridades estatales y federales para iniciar con el combate al coleóptero.
Fuente: Edgardo Rodríguez/SIPSE