Diego Castañón desde hace mucho ha andado cacareando que cuenta con el respaldo para ir por la relección en Tulum (claro que no se sabe si esto es real o puro cuento del edil).
Hay quienes dicen que Castañón figura con buenos números en las encuestas, y que esto es gracias a todo el trabajo que ha venido realizando desde que tomó las riendas del municipio. Pero, ¿realmente ha trabajado?, ¿realmente ha hecho algo?
Lo que hizo fue aprovechar la repentina partida de Marciano Dzul, y únicamente seguir la línea que dejó marcada el ex alcalde, pero a pesar de que tenía todo en “bandeja de plata”, por más que Diego ha intentado remedar la manera de gobernar de Marciano Dzul quien lo hizo a ras de tierra, y manteniendo un contacto directo con la gente, no ha logrado ganarse la simpatía del pueblo, pues aunque se la ha pasado recorriendo calles para la gente sigue siendo un extraño.
Diego Castañón, en su afán de hacerse notar no pierde la oportunidad de levantarse el cuello diciendo que no ha parado en hacer obra pública, construir clínicas de salud, pavimentar calles, iluminar arterias y espacios públicos, y ampliar espacios deportivos, aunque la realidad es que no está más que saludar con sombrero ajeno, puesto que todos los proyectos fueron iniciados por Marciano Dzul y su equipo.
Además al igual que muchos ciudadanos, hay militantes de Morena que no están de acuerdo en seguir apoyando a Diego Castañón, no lo quieren de nuevo en la presidencia, y es que aunque el actual edil ha tratado de hacer hasta lo imposible por colocarse en el gusto de la gente, nomás no ha logrado simpatía alguna. Y si a eso le sumamos que su equipo lejos de ayudarlo parece que solo le mete el pie, el caso de este amigo sí que está complicado.
Mientras tanto, al tiempo que Diego se sigue ocupando en buscar ser el elegido, la inseguridad en el municipio crece cada día más, situación que para nada tiene contenta a los habitantes de este municipio.
