RIBERA DEL RÍO HONDO.- Se construyen y reparan drenes primarios y secundarios para evitar inundaciones en los cultivos de caña de azúcar en la ribera del río Hondo, en donde se invierten alrededor de 120 millones de pesos aportados por los productores cañeros con el apoyo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), los cuales tienen un avance del 80 por ciento.
De acuerdo con los trabajadores, las obras consisten en limpieza de drenes, construcción de desagües y caminos secundarios para que los camiones puedan transportar la caña al ingenio azucarero San Rafael de Pucté.
Los ejidos que han sido beneficiados con este proyecto son Carlos A. Madrazo, Sergio Butrón Casas, Álvaro Obregón, Pucté, entre otros, en donde las obras se encuentran avanzadas.
Esta obra benefició a los productores cañeros de la ribera del río Hondo, pues en las últimas lluvias que se han registrado no han tenido problemas de encharcamientos, porque las aguas pluviales se van directo a los drenes.
El delegado federal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en Quintana Roo, José Luis Blanco Pajón, afirmó que se está trabajando de acuerdo con lo programado para solucionar el problema de inundaciones que tenían en la zona los productores de caña, maíz y sorgo.
Afirmó que entre los años 2014 y 2015 se invirtieron en la ribera del río Hondo alrededor de 120 millones de pesos en la construcción del dren primario y secundario, con el apoyo del Gobierno Federal, estatal y de los productores.
“El dren principal y secundario en la ribera del río Hondo tenía más de 35 años que no recibía mantenimiento, entonces cuando llovió en el 2014 un total de 348 milímetros en sólo un día en Nicolás Bravo, Othón P. Blanco, inunda toda la zona y se perdieron todas las cosechas; la caña bajó sus grados Brix, los caminos sacacosechas quedaron sumergidos por tanta agua, y evita que no puedan pasar a sacar la producción, y sumado a la caída del precio fue un caos total”, abundó.
“Entonces el gobernador Roberto Borge Angulo gestionó recursos en la Conagua y por ello se han logrado invertir 120 millones de pesos en la ribera del río Hondo, por eso ahora que llovió el doble, 632 milímetros en tres días del mes de octubre pasado, no se registró una sola inundación en la zona cañera”, abundó.
Actualmente, cuando llueve la tierra absorbe la cantidad necesaria de agua y lo que sobra se escurre a los drenes –principal y secundarios– y finalmente se escurre al río Hondo, por lo que ya no se inunda la zona cañera. “Ésto hace que los productores vean a la lluvia como una bendición y no como una preocupación”, concluyó.
Fuente: Por Luis Enrique Tuz/Por Esto!