En junio de 2020 se anunció con bombo y platillos la apertura de la Universidad del Bienestar “Benito Juárez García” en el ejido Pucte, en ese momento se dijo que sería un gran beneficio y oportunidad para los jóvenes de la zona, pero la realidad ha sido bastante diferente a lo prometido.
Y es que para junio de este año (2023), padres de familia, alumnos y la población en general comenzaron a levantar la voz debido a ciertas anomalías en la universidad, pues a dos de años de que haya iniciado su construcción, las aulas seguían inconclusas, pese a que son una prioridad para los alumnos. Pero eso no es todo pues también se evidenció la falta de compromiso de algunos profesores que no se presentaban a dar sus clases pero que si seguían figurando en la nómina.
Esta universidad lejos de ser un aliciente para los jóvenes se ha convertido en un verdadero calvario, y no por que la idea sea mala, sino porque los “responsables” han hecho de todo, menos eso RESPOSABLES.
Es una pena que los estudiantes estén siendo humillados, si humillados, porque no hay un adjetivo que los describa, pues pese a que en repetidas ocasiones han solicitad información los encargados se hacen de los oídos sordos los ignoran, tanto en temas académicos, administrativos y ni que decir en el caso de la construcción.
La universidad que se encuentra en el ejido de Pucte desde hace 2 años está en construcción, y no fueron $20 pesos lo que se destinaron para su edificación, fueron millones de pesos, y nada más nada… Sería importante que alguien aclare quién es el o los responsables de dicho recuso y en que se ha gastado porque en construcción nomas no.
Los alumnos ya habían señalado el coordinador Adrián Ake Gómez parecía no tener intención alguna de que se termine la obra, también dijeron que este personaje solapa actitudes que frenan el aprendizaje, por lo que más de una vez han solicitado la intervención de algún funcionario de alto nivel para que atiendan este problema a la brevedad.
Ojala ya pronto alguien atienda esta situación y revise que es lo que está pasando, los estudiantes no pueden seguir siendo afectados de esta manera, su educación, sus derechos y su futuro están siendo pisoteados por el mal manejo de unos cuantos.
Actualmente los estudiantes se han organizado para exigir que se garantice su derecho a la educación:
«Nos encontramos en una situación crítica en nuestra universidad. La falta de respuesta y gestión por parte de nuestros coordinadores ha llegado a un punto insostenible. Es evidente que nuestras necesidades como estudiantes no están siendo atendidas, y la calidad de nuestra educación se ha visto gravemente afectada, llegando incluso al extremo de no tener clases en lo absoluto. Esta situación no puede continuar. Somos nosotros, los estudiantes, quienes más sentimos el impacto de estas decisiones y omisiones. Sin embargo, también somos nosotros quienes tenemos el poder de provocar un cambio. La unión es nuestra mayor fuerza.
Es hora de tomar medidas y exigir lo que merecemos. La unión de los estudiantes es la clave para lograr un cambio significativo en nuestra universidad. Juntos, podemos construir un mejor entorno de aprendizaje y asegurarnos de que nuestras voces sean escuchadas”.